Soy un amante, chico
«Eh». Los ojos de Harrington se dirigen a la cara de Eddie y vuelven a sus manos juntas, una y otra vez. «Así que. Lo estaba, pero no es así, ¿sabes? Porque soy, y solo quería ser,»
«Harrington», interrumpe Eddie, frunciendo el ceño. «Deja de hacerme perder el tiempo. Despídelo, carajo».
Harrington lo mira fijamente, con los ojos entrecerrados. «Está bien. Bien». Hace una pausa, mordiéndose el labio, antes de decir: «¿Eres gay?»
La sangre de Eddie se hiela.
Su cerebro se estanca. «Eh. Creo que no lo entiendo».
Harrington echa la cabeza hacia atrás, frustrado, y maldice en voz baja al cielo. El movimiento agita su cabello, mechones que se enroscan alrededor de sus orejas mientras mira hacia arriba.
Cuando vuelve a mirar a Eddie, dice muy despacio: «Esperaba que fueras gay, Munson, para poder hacerte una chupada y demostrarme a mí mismo que se me da bien».
——
O bien; el equipo de baloncesto vota unánimemente que Steve sería el peor en dar una chupada. Steve quiere probar la verdad de eso con el único tipo que sabe que podría ayudar: Eddie Munson.