Hasta que ya no seamos extraños
Stiles debería haber esperado que Derek desapareciera de repente, ya que el hombre lobo tenía la costumbre de irse sin previo aviso. Sin embargo, Derek siempre aparecía cuando lo necesitaban.
A medida que pasan las semanas, Stiles ya no está confundido y un poco herido. Lo que comenzó como un dolor de corazón comienza a empeorar cuanto más tiempo pasa Stiles sin ver a Derek. Finalmente, su cuerpo comienza a apagarse y su única esperanza parece ser Derek... pero nadie puede encontrarlo.
No hay cura para un corazón roto. Excepto, quizás, la causa del propio corazón roto.
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O aquella en la que Derek se va sin previo aviso y Stiles descubre que podría ser el compañero de Derek y la distancia entre Derek y Stiles, junto con la negativa de Derek a desarrollar el vínculo, está matando lentamente a Stiles. Sin Derek, Stiles morirá, pero nadie sabe dónde está ni cómo contactarlo. Y Stiles apenas se mantiene unido.