Alas de Vidrio Manchado y Hierro
Harry llevaba una vida perfecta. Despertar, calentarse con la luz dorada del amanecer, y luego salía a un día de diversión y aventura. Polinizando flores, ayudando un poco a la población local de abejas. Comiendo pasteles calientes en los alféizares de las ventanas, derribando puestos de libros. Las cosas habituales de las hadas. ¡Y entonces, una mañana apareció un tazón de crema en su balcón, y bueno, ¡la vida solo podía mejorar!
Los rituales de cortejo eran un poco más difíciles para las hadas que para los demonios. Tom solo esperaba estar haciendo todo bien para ganarse la confianza de su pequeña hada._________Empezó simple.
Una mañana, cuando Harry se despertó, al salir para dejar que sus alas de gasa se desplegaran bajo el sol de la mañana, había un pequeño tazón de crema sobre la mesa de su balcón. El tazón en sí era simple, porcelana blanca con pequeñas flores pintadas. Nada especial. Pero la crema.
¡Oh, la crema!
Era espesa y fresca, el embriagador aroma de la miel dulce y espesa llenaba el aire. Quienquiera que la dejara allí no hacía mucho que se había ido, las gotas de condensación brillaban mientras rodaban por los lados y caían sobre la mesa. Tentador. Provocador. Y Harry fue incapaz de resistirse.________
¡Semana del Omegaverse de Harry Potter, Día Dos! Demonio Tom, Hada Harry, Cortejo