Las voces en mi cabeza me están matando
El segundo peor día de la vida de Katsuki es cuando se presenta.
Katsuki es un alfa, pero haría literalmente cualquier cosa por haber sido un Omega o un Beta. Es demasiado peligroso, demasiado salvaje, demasiado agresivo. Está convencido de que si toma suficientes pastillas y se pone suficientes parches aromáticos, la gente lo tratará de forma diferente.
Nunca lo hacen y Katsuki sigue en espiral.