Mar de sueños despiertos
Steve pone los ojos en blanco y le da a Eddie una mirada de exasperación afectuosa. «¿Cómo me vas a follar si estás enfadado conmigo?»
Eso hace reír a Eddie contra su voluntad, es como un puñetazo. «Oh, créeme, me las arreglaré».
Cierra la puerta.
Las velas arden sin parar.
La ventana está abierta.
La magia sexual es peligrosa.