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Draco parece haber cambiado desde la guerra, e insiste en enmendar sus acciones. Pero sigue siendo un Malfoy, por el amor de Dios… Y, al parecer, un Malfoy con una cierta inclinación…

A Harry le gustaba su vida, muchísimas gracias — así que fue bastante malo cuando un hada astuta lo maldijo para que saltara a realidades alternativas. ¿Pero ver a Malfoy en todas ellas? Definitivamente demasiado. Y peor aún: necesitar la ayuda del bastardo para averiguar cómo salir de eso. Era un desastre esperando a suceder, de verdad. Bueno... probablemente.

Darcy Lewis siempre había tenido la opción, por parte de sus padres, de decidir cuán públicamente quería ser sobre su origen y lo que era. Así que optó por mantenerse discreta, fuera del foco de atención, y fingir no ser más que humana. Era el plan perfecto. Nadie sospecharía nada, y su vida sería tranquila. Pero su plan perfecto se detiene en seco un día, cuando se encuentra de bruces con dos súper soldados que tienen algunos planes perfectos propios, y todos esos planes la incluyen.

Harry y Malfoy han sido amigos durante cinco años, compañeros de piso durante cuatro, y aún así Harry nunca ha oído a Malfoy decir su nombre de pila... hasta que lo hace, acompañado de una variedad de otros ruidos. Harry solo desea que no fuera a través de las paredes delgadas como el papel de Grimmauld en otra noche que Malfoy pasa con otro tipo. O, Harry lucha con su cordura al escuchar las noches de Malfoy con tipos anónimos y pierde el control completamente cuando una noche el tipo tiene nombre... y es el de Harry.

Malfoy es como una picazón bajo la piel de Harry un día normal. Es aún peor cuando están atrapados en un ascensor.

... tu compañero tiene aproximadamente cinco meses de embarazo. Eso, por supuesto, significa que Alec está más cachondo, más atrevido y más húmedo. Nadie perdonará a Magnus por no ser un buen compañero. (O: Sexo durante el embarazo en un verso A/B/O porque sí)