La laguna Azul
Draco y Hermione están varados en una isla desierta.
«Quita tus ojos de mí», susurró, ofendida. Él no lo hizo. Continuó leyéndola como si fuera un libro desgastado, lleno de palabras y frases familiares que hechizaban. «Deja de mirarme así», se lamió los labios desesperadamente. «¿Como qué?» Murmuró Draco. «Como si de repente me acabaras de conocer», explicó. «Como si no tuviéramos un pasado».